Los acabo de hacer, y no me he podido resistir a colgarlos aquí inmediatamente. No os podéis imaginar el aroma tan increible que hay en toda la casa, y el sabor....de muerte. Saben a chocolate de verdad, no como los que se compran, que de chocolate tienen nada más que el nombre en el envoltorio. Gracias a Irmina, del blog "El zurrón de los postres", que tiene unas recetas estupendas.
Ingredientes:
-300 gr. de harina de repostería
-160 gr. de manteca de cerdo
-160 gr. de azúcar glas
-½ cucharadita de canela molida
-50 gr. de almendra molida
-40 gr. de chocolate puro en polvo
-Unas gotas de esencia de vainilla (yo le puse vainilla en polvo).
Preparación:
En un bol ponemos la harina y la almendra y la tostamos al horno precalentado 160º, unos 10-15 minutos. Dejamos enfriar.
La manteca debe estar a temperatura ambiente, le ponemos el azúcar glas, el cacao y la canela, mezclamos bien con una cuchara de madera. Poco a poco incorporamos la harina con la almendra, la vainilla y amasamos hasta que esté homogénea. Dejamos reposar en la nevera 15 minutos.
Precalentamos el horno a unos 170º. Cubrimos la bandeja del horno con un papel vegetal
Cogemos un trozo de masa, la aplanamos con el rodillo entre dos film (la dejamos con un grosor de aproximadamente 1 cm.) y cortamos con un corta pastas de la forma que más nos guste. Colocamos en la bandeja y horneamos durante 25-30 minutos.
Una vez fríos espolvoreamos con azúcar glas formando dibujos.